El proyecto Sharing Fridge de Oasis Green Food Bank se lleva a casa el premio anual Global Food Bank Innovation Award
Una mujer está de pie junto a un refrigerador en una plaza pública de Shanghái, sacando comida para usarla. Los gastos mensuales están en su mente. Su esposo tiene parálisis y su hijo necesita útiles para el nuevo año escolar.
Debido a estas demandas, ella está luchando para llegar a fin de mes. Y es por eso que este refrigerador público se ha convertido en un recurso invaluable durante su tiempo de necesidad.
Esta familia es una de las 230.000 personas en Shanghái que viven de asignaciones que apenas cubren los gastos básicos de subsistencia. Al mismo tiempo, la ciudad desperdicia toneladas de productos orgánicos al día, la mayoría de los cuales son alimentos.
Para ayudar a abordar estos problemas y como una extensión de sus servicios de banco de alimentos, Oasis Green Food Bank, miembro de The Global FoodBanking Network (GFN) con sede en Shanghai, desarrolló el proyecto "Sharing Fridge", que ofrece a las familias necesitadas un acceso más fácil a alimento. Las organizaciones comunitarias y los restaurantes cercanos suministran el exceso de comida de forma segura en el refrigerador público. Una vez registradas en el “Refrigerador Compartido”, las personas necesitadas pueden acceder a los alimentos sin costo alguno.
“Cada refrigerador es como un mini banco de alimentos”, dijo Eve Li, directora de Oasis Green Food Bank. Eve explicó que los refrigeradores son buenos sustitutos de los bancos de alimentos en áreas que aún no han desarrollado la infraestructura o no cuentan con el personal para operar un banco de alimentos en pleno funcionamiento.
Los usuarios pueden recibir una comida al día, accediendo al contenido del frigorífico a través de varios canales tecnológicos: Códigos QR, reconocimiento facial, WeChat o extracto de código de DNI. Esta tecnología proporciona datos a Oasis Green Food Bank, que utiliza la información para comprender dónde se necesitan más alimentos y el tipo de alimentos que se necesitan. Los voluntarios del banco de alimentos luego recolectan y comparten la comida restante en el refrigerador con la comunidad.
Desde el inicio del proyecto en 2016, más de 40 000 personas han obtenido alimentos de los refrigeradores. Oasis Green Food Bank está explorando formas de expandir este programa para que 1,000 refrigeradores estén disponibles en diferentes sitios en Shanghái.
“En cierto sentido, Sharing Fridge brinda una plataforma para que empresas y grupos benévolos se dediquen a la comunidad, y para que las personas que experimentan dificultades sepan que hay ayuda”, dijo Eve.
De hecho, la mujer mencionada anteriormente en este artículo ahora quiere retribuir a la misma comunidad que la ayuda. Ella y su hijo son voluntarios en el centro cultural durante las vacaciones de verano. El centro otorgó recientemente a su hijo el título de “Mensajero de Benevolencia”.
Reconocimiento de la Comunidad Internacional de Bancos de Alimentos
El proyecto Sharing Fridge recibió recientemente el premio Global Food Bank Innovation Award en el Food Bank Leadership Institute (FBLI) 2018 de GFN en Houston. El premio reconoce y celebra un programa innovador que aumentó excepcionalmente la capacidad del banco de alimentos para satisfacer las necesidades de hambre en su comunidad. Doce finalistas presentaron sus programas a más de 100 asistentes del FBLI, a quienes luego se les pidió que votaran para determinar el ganador del premio. Los finalistas fueron:
Sharing Fridge ganó por su uso creativo de la tecnología para permitir que los beneficiarios accedan a alimentos donados almacenados en refrigeradores en Shanghái.
“Nos sentimos honrados de ganar el premio, que es un estímulo profesional para nosotros”, dijo Eve. “El premio nos será útil en el futuro cuando recolectemos alimentos o promovamos Sharing Fridge”.
Para obtener más información acerca de Sharing Fridge, visite Sitio web de Oasis Green Food Bank.
